El puerto de pesca, un saber hacer de calidad
De la pesca al plato
« Savoir-Faire La Rochelle »
Cada día, varias especies de pescados y mariscos son desembarcados en los pontones del puerto de pesca en dirección a la lonja, donde se juntan los pescadores, los mayoristas y los minoristas. Estos productos del mar son enviados seguidamente a los numerosos restaurantes rocheleses o a los puestos de los mercados, ¡para el deleite de tu paladar!
¿Has notado ya la presencia del logotipo «Savoir-faire La Rochelle» (Saber hacer La Rochelle) en las diferentes pescaderías de La Rochelle y de sus alrededores? Es la marca colectiva del puerto pesquero de La Rochelle. «Saber hacer La Rochelle» es una garantía de que los productos del mar han sido desembarcados y adquiridos en el puerto de La Rochelle. Por lo tanto, es una garantía de calidad, que pone en valor los pescados, mariscos y moluscos capturados por los profesionales, que desean practicar su oficio de una forma responsable. Estos marineros, que se comprometen a practicar una pesca sostenible, ofrecen a los numerosos consumidores productos del mar que cumplen con los criterios de calidad de alta gama.
La pesca tradicional rochelesa
Un poco de historia...
El mercado de pescado de La Rochelle ha ocupado varios lugares diferentes a lo largo de los siglos. Sujeto a los cambios en los barcos de pesca, que cambiaron las condiciones de la pesca y aumentaron la capacidad de captura, fue necesario mover las infraestructuras a lugares más grandes, mejor equipados y, lo más importante, mejor adaptados. Así, la pesca se ha ido trasladando con el paso del tiempo, del Puerto Viejo en el siglo XIII, pasando por la Dársena des Chalutiers y la construcción de la casa de subastas, hasta el puerto pesquero actual de Chef de Baie, situado al oeste de la ciudad, desde 1994.
Actualmente convertidos, algunos de estos sitios nos vuelven a descubrir la imagen del antiguo Convento de los Carmelitas, rue St-Jean-du-Perot, convertido en la Coursive, escenario nacional, o incluso la casa de subastas de la dársena des Chalutiers, que ha estado en funcionamiento durante 41 años antes de su rehabilitación por el ayuntamiento: el Centro de Congresos ocupa ahora la parte norte del sitio, el muelle este acoge a los artesanos y la parte suroeste del final del muelle constituye la grada y los muelles de la dársena des Chalutiers son el sitio del Museo Marítimo.